Estudios preliminares a?aden otra consecuencia de salud de tener sobrepeso. Somnolencia, obesidad y estr?s psicosocial»
La obesidad se ha relacionado con una variedad de problemas de salud que incluyen a la enfermedad cardiaca, la diabetes y ciertos c?nceres, y ahora una nueva investigaci?n a?ade la somnolencia diurna excesiva a esa lista.
Los riesgos bien conocidos asociados con la somnolencia diurna excesiva entre los adultos incluyen accidentes provocados por conducir con sue?o y lesiones en el lugar de trabajo.
Los nuevos estudios relacionados hallaron que los principales factores que impulsan la somnolencia diurna son la obesidad y la depresi?n. Los hallazgos ser?n presentados este mi?rcoles en la reuni?n anual de las Sociedades Profesionales del Sue?o Asociadas (Associated Professional Sleep Societies), en Boston.
«La ‘epidemia’ de somnolencia es paralela a la ‘epidemia’ de obesidad y estr?s psicosocial», asegur? en un comunicado de prensa de la reuni?n el autor del estudio, el Dr. Alexandros Vgontzas, del Centro Hershey de Investigaci?n y Tratamiento del Sue?o de la Universidad Estatal de Pensilvania. «La p?rdida de peso, la depresi?n y los trastornos del sue?o deben ser nuestras prioridades en t?rminos de prevenir las complicaciones m?dicas y peligros de salud p?blica asociados con la somnolencia excesiva».
Dos estudios incluyeron al mismo grupo de 1,741 adultos. De ?stos, 1,173 no sufr?an de somnolencia diurna excesiva al inicio del estudio, y 222 s?. La depresi?n y la obesidad fueron los principales factores de riesgo de la somnolencia excesiva de «nuevo inicio» tras 7.5 a?os de seguimiento. El aumento de peso fue el principal predictor de somnolencia diurna persistente en el mismo periodo. La tasa de somnolencia excesiva de nuevo inicio fue de 8 por ciento, y la tasa de somnolencia diurna persistente fue de 38 por ciento. Cuando los individuos perdieron peso, se sent?an menos cansados durante el d?a.
Los hallazgos de los dos primeros estudios fueron respaldados por un estudio de 103 voluntarios sanos, que se llev? a cabo durante cuatro noches en un laboratorio del sue?o. Tambi?n apunt? a la obesidad y a la depresi?n como riesgos de somnolencia, informan los investigadores.
El Dr. Scott Kahan, director del Centro Nacional del Peso y el Bienestar en Washington, D.C., dijo que la relaci?n entre la obesidad y el sue?o es compleja. «Este estudio a?ade m?s peso al hecho de que probablemente sea bidireccional». Esto significa que la obesidad podr?a ser la gallina o el huevo. «La obesidad y el aumento de peso afectan al sue?o, y el mal sue?o afecta al peso desde una perspectiva fisiol?gica y conductual», plante?. Por ejemplo, «cuando uno est? cansado, es dif?cil que le importe si se come una zanahoria o un pastel», advirti?.
Las personas que tienen sobrepeso o son obesas tambi?n est?n en mayor riesgo de apnea del sue?o, una afecci?n caracterizada por pausas en la respiraci?n durante el sue?o. Esto puede resultar en somnolencia diurna excesiva. Pero la conexi?n entre la somnolencia y la obesidad incluye m?s que solamente la apnea del sue?o, asegur? el Dr. Michael Breus, experto en el sue?o con sede en Norfolk, Virginia. «Hay m?s personas somnolientas en el mundo que casos de apnea del sue?o», se?al?.
«Como pa?s, tenemos que perder peso», enfatiz?. «Uno de los efectos ser? un alivio del cansancio diurno excesivo y una reducci?n leve en la depresi?n». Los problemas de sue?o y la depresi?n tambi?n est?n relacionados de manera inextricable. «Cuando administramos un antidepresivo a las personas con depresi?n e insomnio, el insomnio mejora igual que la depresi?n, y entonces no tienen tanto sue?o de d?a».
El Dr. David Kuhlmann, director m?dico de medicina del sue?o del Centro Regional de Salud Bothwell en Sedalia, Missouri, se mostr? de acuerdo. «La p?rdida de peso deber?a mejorar el nivel de somnolencia diurna, y este estudio lo respalda», dijo.
Debido a que esta investigaci?n se present? en una reuni?n m?dica, sus datos y conclusiones deben ser considerados como preliminares hasta que se publiquen en una revista revisada por profesionales.
FUENTES: Michael J. Breus, Ph.D. sleep expert, Norfolk, Va.; David Kuhlmann, M.D., medical director, sleep medicine, Bothwell Regional Health Center, Sedalia, Mo.; Scott Kahan, M.D., director, National Center for Weight and Wellness, Washington, D.C.; June 13, 2012, presentations, Associated Professional Sleep Societies annual meeting, Boston